EL ENTRENAMIENTO PERSONAL
Cada vez más, conseguimos alejar
los fantasmas que cuestionaban el trabajo del entrenador personal al
calificarlo de frívolo o menospreciarlo por el sentido elitistacon el que creció. El entrenador
personal, hoy en día, es un especialista en mejorar los hábitos de vida
saludables y la calidad de vida. Podrá trabajar con clientes sedentarios, con
personas con patologías que limiten su autonomía, colaborando en la rehabilitación
de lesiones o enfermedades, preparando a deportistas aficionados y profesionales,
etc. Pero, en cualquier caso, su profesionalidad es la marca que lo distingue.
No sólo el trato personalizado, algo que es relativamente sencillo de llevar a
cabo, sino también el conocimiento y la utilización de la herramienta más
adecuada para cada cliente, del ejercicio mejor prescrito, del material y la
tecnología mejor empleados y de las estrategias
de motivación más convincentes. El aval que certifica esta profesionalidad es
el éxito en la consecución de los objetivos del cliente.
El futuro del entrenador
personal se encuentra en el reconocimiento en primer lugar del sector de la
actividad física, en segundo lugar del sector médico y sanitario, y finalmente de la sociedad, que considere al
entrenador personal como un profesional al que recurrir cuando quiera asegurar
su éxito en relación con la actividad física. Así como no se concibe a un
médico atendiendo a varios pacientes simultáneamente o se entiende que una clase
de inglés en la que sólo haya un alumno será más provechosa, así el entrenador
personal es necesario para muchas personas que no saben cómo acercarse al
ejercicio físico o que quieren obtener un mayor rendimiento en su
entrenamiento.
En la situación actual, el
mercado laboral detecta rápidamente las deficiencias de los profesionales que
no tienen los conocimientos necesarios y suficientes para autodenominarse
entrenadores personales, y permite a los grandes expertos desarrollarse plenamente
en el ámbito del entrenamiento personal sin necesidad de colgarse ningún cartel
a la espalda. Cualquier fuente de información es bienvenida. Cualquier diferencia
en el servicio y en el trato es apreciada por el cliente. Cualquier valor
añadido fideliza.
Espero que el entrenador
personal, sea el presente y el futuro, sepamos situarnos en el mercado, ofrecer
calidad, creer en nuestra profesión y sentir pasión por lo que hacemos.
Tú eres un ejemplo magnífico de entrenador. La pasión que pones en todo es fundamental para motivar a los demás. Yo lo sé de primera mano.
ResponderEliminarAhora, además, estás comprometido con este blog que enriqueces poco a poco con informaciones teóricas y con tu experiencia.
Ánimo y gracias.
Antonio Iñigo